Por Abraham Garza Alemán
En el pasado el flujo de la información fue sumamente lento, imprimir libros llevaba meses e incluso semanas, enviar una carta suponía esperar una cantidad considerable de días para obtener una respuesta, los medios de comunicación eran escasos y solo unos pocos podían darse el lujo de acceder a información de buena calidad, esto fue así durante mucho tiempo, pero todo cambió con la llegada del internet, la telefonía, la fibra óptica, etc.
Ahora un mensaje literalmente puede darle la vuelta a la tierra en cuestión de milisegundos, podemos saber en tiempo real lo que ocurre en zonas distantes como China o Australia, poseemos en nuestros dispositivos móviles el acceso a cantidades estratosféricas de datos, al nivel que incluso hoy en día cualquier ciudadano con acceso a internet, posee mayor acceso al conocimiento de manera gratuita, que los antiguos reyes de la edad media o del renacentismo, se ha cumplido lo que en su momento dijo el eminente escritor e investigador Isaac Asimov, allá en 1988, entrevistado por Bill Moyers Una vez que tengamos conexiones de computadora en cada casa, cada una de ellas conectada a enormes bibliotecas, donde cualquiera pueda hacer cualquier pregunta y obtener respuestas y referencias de algún tema que te tenga interesado desde niño, no importará lo que digan los demás porque es en lo que tú estás interesado.
En el pasado alguien podría imaginarse nuestro presente como una sociedad de intelectuales y filósofos, una sociedad en donde el conocimiento fluyera a raudales supondría un mundo en el que los ciudadanos fueran críticos y exigentes tanto consigo mismos, como con sus respectivos gobiernos, un mundo en el que todos pensaran y se cuestionaran, un mundo de sana crítica. Pero lamentablemente la realidad no se le acerca ni en lo mas minimo a este utópico sueño, solo basta ver la cantidad de horas que la gente desperdicia en entretenimiento basura, una sociedad que ha vuelto famosos a sujetos como Bad Bunny o la inmensa cantidad de youtubers que se dedican a generar un contenido decadente y vomitivo, donde reina el chisme, el amarillismo y el infantilismo, sin lugar a dudas es una sociedad que merece caer en el olvido.
Por lo que a esta epidemia de contenido basura, se suma un aspecto nunca antes visto en la historia de la humanidad, la infodemia, que podríamos definir como el exceso de información, ya que si en el pasado podias aumentar tus conocimientos mediante el cultivo de la lectura y la lógica, ahora uno debe ser capaz de discernir entre que ignorar y que considerar, así que primero debemos entender que siempre ha sido el sueño de los poderosos poseer la capacidad de controlar el discurso, los relatos son los que construyen o derriban reinos y civilizaciones, ya que mientras la ciencia y la tecnología pueden darnos el ¿Cómo? solo el relato puede darnos el ¿Por qué? Solo mediante el eficiente uso del relato hemos podido forzar una sociedad y una civilización que ha sabido mantener la unidad y avanzar de una manera, hasta cierto punto uniforme, por lo que aquellos que controlen el discurso y el relato, podrán controlarlo todo.
Un caso muy particular lo tenemos en México, ya que durante nuestra historia hemos tenido múltiples convulsiones de todo tipo: políticas, económicas, sociales, etc. por lo que si nos remontamos hasta el porfiriato podemos ver un intento bastante organizado sobre la construcción del relato, ya que con Porfirio Diaz (con sus luces y sombras) vimos como se empezaba a consolidar la idea de una nación con sus respectivos símbolos estandarizados: la bandera, el escudo y el himno nacional, aunado a la ya conocida referencia de hacer coincidir el grito de Hidalgo con el nacimiento de Díaz, a partir de aquí quien tomaría el monopolio del relato sería el ya conocido PRI, quien durante más de 70 años nos bombardeó con toda una serie de mentiras y relatos con tal de construir la idea de una nación unificada y de un partido que representaba los intereses de sus ciudadanos, la historia ya la conocemos y el PRI acabó por desmoronarse, pero su modelo podemos verlo hasta nuestros días, todos pelean por el monopolio del relato y todos buscan controlar el pasado para poder controlar el presente y por ende, controlar el futuro, quien posea el relato obtendrá el poder.
Por tal motivo hay que reconocer primero que ningún medio es neutral, todos tienen propietarios y accionistas que esperan obtener un beneficio económico. Ninguno de los grandes medios tiene como prioridad decir la verdad, sino que su simple objetivo es el lucro, solo basta echar un ojo aquí en occidente. En Europa la comunicación se distribuye mediante las compañías RTL Group, CEME, Modern Times Group y Sanoma. En diecinueve países europeos, las cuatro citadas multinacionales son los cuatro primeros grupos de referencia y en otros diecisiete se encuentran entre los principales. Pan-European Broadcasters opera como una marca, y sus componentes tienen su base en los Estados Unidos. Entre esos grupos pan-european están Discovery, Viacom, WarnerMedia y The Walt Disney Company.
Esto explica porque la encuesta de Gallup en 2019, arrojó la interesante cifra de que solo el 41% del público estadounidense confiaba en los medios tradicionales, curiosamente mientras el 69% del electorado demócrata confiaba en los medios tradicionales, en el electorado republicano dicha cifra cayó hasta el 15%
Por otro lado tenemos al conglomerado GAFTAM, las empresas tecnológicas más influyentes y mejor cotizadas en bolsa, que por ahora son Alphabet (Google), Amazon, Facebook, Twitter, Apple y Microsoft, que no solo se dedican al ramo de los servicios de software, sino que también son importantes generadores de opinión y han demostrado ser sumamente eficientes en moldear los pensamientos e incluso los sentimientos de tanto individuos como comunidades.
La escritora Cristina Martin Jimenez, en su polémico libro la tercera guerra mundial ya está aquí, ha encontrado la siguiente relación entre dos de las empresas más poderosas del mundo, observenlo bien y podran encontrar que los famosos fondos de inversión Blackrock y Vanguard, quienes en conjunto poseen influencia en todas las grandes empresas de occidente, además que ambos están ligados al infame y polémico club Bildelberg, que por cierto, el presidente de Blackrock, Larry Fink dijo en el foro de Davos y cito “Hay que educar al pueblo para que vote el líder correcto”:
Estas empresas, por mencionar algunas, han contribuido enormemente en dos aspectos fundamentales en la erosión de la libertad de expresión, primero, nos han bombardeado con información supuestamente “verificada”, nos han puesto actores, cantantes, futbolistas, etc. en la promoción de una única agenda y segundo, han desempolvado la vieja técnica de “señalar al disidente”, solo basta con echarle un ojo a dos fenómenos actuales, la pasada crisis sanitaria y el conflicto entre Rusia y Ucrania, ya que si te atrevias a criticar o solo cuestionar el relato oficial, llegaban grandes cantidades de fanáticos a decirte que eras un negacionistas de la ciencia, que debías morir, que eras un fascista, pro putin, autoritario, fascista, ignorante, etc. la lista podría bien abarcar varias páginas.
pero muy pocos notaron que con esto se estaba instalando una especie de ministerio de la verdad 2.0. recordemos que el ministerio de la verdad es mencionado por el escritor George Orwell en su magnífica obra 1984, en el cual describe un mundo distópico en el que dicho ministerio de la verdad era el encargado de mentir y manipular todo tipo de documentos con la finalidad de que todo coincidiera con la versión oficial. esto es algo que ya está pasando, no algo que vendrá en un futuro, solo basta ir a Facebook o YouTube donde además de la ya conocida censura, si cuestionas ligeramente, en la parte inferior de tu video o publicación aparecerá una leyenda diciendo que tus datos son falsos y por ende eres un mentiroso, para que de esta manera sin la necesidad de censurarte tajantemente, el resto de internautas te tachen de conspiranoico y le resten importancia a tu publicación.
Para esto se han valido de una industria emergente, los fact checkers, los héroes que se encargaran de salvarnos y protegernos de los malvados desinformadores de derecha que buscan cuestionar el relato oficial y poner en tela de juicio la veracidad de la información, entre ellos podríamos mencionar Project Syndicate, quien se presenta con la careta de ser una organización internacional y sin ánimo de lucro, donde se reúnen tanto reporteros como periódicos, aunado al hecho de presumir que solo distribuye contenido de calidad y entre sus filas destacan premios nobel, economistas, líderes empresariales y académicos certificados. por otro lado podríamos destacar la bien financiada Coalición para la Procedencia y Autenticidad de los Contenidos (C2PA) que es un conglomerado de empresas de la comunicación, entre las que destacan la Red Internacional de Verificadores de Datos del Instituto Poynter, la Joint Development Foundation, la Content Authenticity Iniciative, el proyecto Origin (dirigido por Microsoft y la BBC) que por cierto, el instituto Poynter está financiado tanto por la Open Society de George Soros, como por las diversas filiales de Mark Zuckerberg y Bill Gates, así que quienes están controlan el software y tienen gran poder en las redes sociales, también están involucrados en la “verificación de datos” ¿no les parece sospechoso al menos?
Por otro lado también podemos mencionar el sitio web de noticias, la silla vacía donde ellos mismos admiten haber empezado gracias a la open society de Soros y según sus datos publicados, el 35% de su financiamiento vino desde el exterior, revelan que la distribución de la siguiente manera 9 por ciento de USAID, una agencia estadounidense que se ha caracterizado por destinar recursos hacia la promoción de políticas afines al estado profundo, especialmente del partido demócrata; 5 por ciento de la Embajada Británica; 6 por ciento de la Embajada de Canadá; 3 por ciento de FORD Foundation; y otro 12 por ciento entre OSI, IFCN, Membership Puzzle, DAR y Google, por otro lado Facebook contribuyó en un 24% y el resto vino de otras pequeñas organizaciones y particulares. Otro dato interesante es que uno de los colaboradores Nicolás Acosta, quien tiene un 5% de participación, es un ingeniero que trabaja para Silicon Valley en el área de la inteligencia artificial.
Otro caso que podemos analizar es el sitio argentino de chequeado, en donde destaca el financiamiento de Google, Facebook, las embajadas de USA, Canadá y Reino Unido, además del polémico National Endowment Democracy quien en no pocas ocasiones ha sido acusado de estar estrechamente relacionado con la CIA, al grado que se le ha llegado a conocer como “la segunda CIA”, sin contar al resto de patrocinadores de menor importancia.
Con todo esto debemos entender que no existen como tal “verificadores neutrales” especialmente si la gran mayoría están siendo financiados por las mismas entidades, ¿no les parece curioso que los mismos actores inviertan en casi todas las agencias de verificación? más bien este es un muy claro caso de una operación de ingeniería social a gran escala. criticamos a China por el crédito social y la inmensa censura que el gobierno somete a sus ciudadanos, pero en occidente vamos hacia el mismo camino e incluso me atrevería a decir que al sistema totalitario que nos quieren someter será mucho peor que el modelo del partido comunista chino, porque mientras en oriente se tiene un modelo totalitario, cuyo unico objetivo es el control eficiente de la población, aqui en occidente dicho modelo se esta combinando con agendas mucho mas dañinas, como lo son la agenda queer, ambientalista, feminista, abortista y anticristiana, lo cual no solo supone una amenaza para las libertades individuales, sino para la misma base de la sociedad, la familia, ya que con la imposicion de la corriente progresista, lo personal se ha vuelto politico, por lo que dichos ingenieros sociales no solo aspiran a un estado omnipotente, sino que su objetivo es controlar incluso los pensamientos, emociones y deseos de la población, que dicho sea de paso ya van bastante avanzados, ya que como lo mencione al inicio, nos han vendido música, literatura y entretenimiento basura y de buena gana, una gran parte de la población la ha venido asimilando, y disfrutando, un claro ejemplo de la ventana de Overton.
Por último me gustaría comentarte que nuestro buen amigo y colaborador, Sergio Maldonado ha lanzado una iniciativa en change.org, con la finalidad de hacer evidente el atropello de este ministerio de la verdad que buscan imponernos y a su vez manifestar nuestro rechazo a la iniciativa de los fact checkers, puedes firmar aquí
Fuentes a consultar
https://news.gallup.com/poll/267047/americans-trust-mass-media-edges-down.aspx
https://www.lasillavacia.com/la-silla-vacia/quienes-somos/#Financiaci%C3%B3n
https://www.fmprc.gov.cn/eng/zxxx_662805/202205/t20220507_10683090.html
https://www.elmundo.es/economia/2015/01/25/54c3ef0bca474165768b457e.html