Por Abraham Garza Alemán
A mediados de noviembre de 2021 la UE condenó a Polonia a pagar la cifra de un millón de euros al día, la más alta hasta la fecha, está directamente relacionada con la sala disciplinaria que significa el fin de la independencia judicial, con el objetivo que Polonia suspenda las actividades de dicho órgano.
Ya que como lo comentamos anteriormente, dicha sala tiene el poder de sancionar a los jueces que no vayan por el camino dictado por el ejecutivo, que por cierto ya la unión europea había advertido a Polonia en diversas ocasiones acerca de este tema.
En dicha resolución el vicepresidente del tribunal europeo señaló que el cumplimiento de estas medidas cautelares es necesario para evitar que se lesione de forma irreparable el ordenamiento jurídico de la unión europea acerca de los derechos de los individuos y los valores en que se basa la unión, en particular el estado de derecho.
Que por cierto Polonia en Julio del 2021 se comprometió a desmantelar dicha sala disciplinaria pero no han hecho absolutamente nada para cumplir dicha promesa.
La sanción anteriormente mencionada tiene un precedente del 2017, cuando Polonia se negó a proteger un bosque primigenio y se le condenó a una multa de 100,000 euros al día por incumplimiento, que por cierto en esta ocasión después de un día Polonia cedió ante la justicia europea.
A todo esto se le suma una sanción que se impuso en octubre por la justicia europea, debido a que Polonia no quiso cerrar una mina de carbón, lo cual se le condenó a medio millón de euros al día. Dicha resolución fue tomada no por el típico discurso ambientalista, sino porque dicha operación daña gravemente la corriente de agua subterránea de su país vecino, la República Checa. Aunque como lo hemos mencionado anteriormente, Polonia nunca ha tenido reparos en ser ese vecino molesto y quejumbroso que solo piensa en sus caprichos a corto plazo, sin importarle lo que le ocurra a los demás, ya sea con Rusia, Lituania, República Checa o Bielorrusia.
A todo esto debemos sumarle que Polonia fue uno de los países que a cambio de convertirse en un satélite de la OTAN y permitir la entrada de tropas y armamento en su territorio, se le benefició con la entrada en la unión europea y su jugoso mercado, esto trajo un grave problema, ya que los países del este de Europa, no contaban con los requisitos para entrar en dicha organización y su entrada solo trajo elementos muy negativos para el conjunto de los países europeos que sí cumplían con todos los requisitos.
Es por eso que Polonia mantiene una integración a medias, tomando lo que le beneficia y haciendo a un lado lo que no, aunque este problema ya tiene años, lo cierto es que, ya que el actual gobierno quiere establecer una dictadura y desaparecer la independencia judicial, lo que efectivamente no puede pasar desapercibido por la unión europea. Cosa que ha ido sucediendo desde 2017 con la sustitución de jueces.
Esto ha ido cerrando poco a poco el círculo para convertir a Polonia en una dictadura y esta se siente confiada ya que cuenta con el respaldo de la OTAN y cuando alguien sale a criticarla hábilmente sacan el hombre de paja anti ruso y también cuando le conviene saca el tema del globalismo y la ideología de género para venderle a los conservadores occidentales un cuento ya bastante gastado.
Muchos no saben que Polonia efectivamente cuenta con una ley de aborto que permite exterminar sistemáticamente a los niños con síndrome de Down y que el número de polacas que aborta es bastante considerable. E incluso ha amenazado con una tercera guerra mundial si la unión europea no se somete a sus deseos.
Es por eso que puedo afirmar que Polonia es el claro ejemplo de lo que una nación libre, democrática y soberana debería hacer jamás, ya que además de su conducta dictatorial, sigue manteniendo funcionarios que son negacionistas del holocausto, antisemitas, fanáticos religiosos que repetidamente hacen apología a la violencia contra quienes se les oponen, mientras que en occidente aquellos que dicen defender la libertad se dejan llevar por las imágenes de hombres rezando el rosario y manifestaciones con ídolos religiosos.
Lo cual cabe decir que no tiene nada de malo, sino que ese tipo de conductas solo están siendo utilizadas para darle un lavado de imagen a una dictadura pendenciera, que por cierto parece que su próximo paso es cometer violencia contra las minorías étnicas y religiosas, ya que hace poco hicieron gala imágenes de sacerdotes bendiciendo las armas del ejército, lo cual produjo en mí, un asco terrible.
A estas alturas se necesita ser muy ignorante, malvado o idiota para defender un régimen como el de Polonia, y que como siempre decimos los conservadores “a los hechos no les importan tus sentimientos”, por lo que es un simple acto de coherencia condenar aquellas políticas liberticidas y dictatoriales.