Por: Lic. José de Jesús Reyes Meneses
El día 20 de octubre se dio a conocer a nivel nacional una “plataforma política” para hacer contrapeso al actual gobierno llamado “Si por México”, pero, esta no es simplemente una plataforma cualquiera, sino una plataforma que ha nacido muerta por sus impulsores, ya que por ser apartidista, se ofrecen a los políticos que ratifiquen sus puntos.
Esta plataforma se presentó en un evento digital por YouTube teniendo a una actriz como protagonista diciendo que buscan un si para el cambio de México y que se salga adelante, utilizando a las figuras “apartidistas” como uno de los integrantes de la familia Le Baron, al igual que al líder visible de los padres de niños con cáncer, esta plataforma se basó en los “necesitados mediáticos” para llamar la atención.
El presidente Obrador inmediato cayó en el juego al comparar su logo con el de la campaña del sí de Augusto Pinochet en Chile, olvidando que su propio sitio web mientras era oposición, y que se volvió un sitio pornográfico por falta de pago, llevaba también un sí, a lo que prácticamente se estaba golpeando a sí mismo.
¿Pero por qué digo que nació muerta esta plataforma? es simple, el ideario de la misma es de la complacencia del presidente y de la ideología progresista que actúa como caballo de Troya en la sociedad mexicana. Para comprobarlo veamos algunos aspectos que tiene su página de consulta.
Empezamos con la famosa x como parte de tratar a través de un “lenguaje inclusivo” llamar a la generalidad de la gente olvidando las reglas gramaticales, al igual que ideas de una política fiscal “progresiva y justa” para que el estado pueda ampliar la inversión en servicios básicos, es decir, cobrar más con el pretexto de llevar servicios a comunidades pobres, el estado benefactor en su máxima expresión.
Igualmente, a través de su plataforma, apuestan por la manutención gratuita del estado a la población en extrema pobreza a través de un “Ingreso Básico Alimentario” que corresponda a los gastos que hace los programas sociales del actual gobierno, es decir, no apuestan por sacar de la pobreza a la población, sino que sigan así solo con dinero. De lo que tenía que ser un recurso extraordinario por contingencia lo quieren volver otro programa electoral.
De la misma forma buscan la “igualdad sustantiva” para las mujeres en todos los aspectos, es decir, crear programas “progresistas” para recordarles a las mujeres que por serlo son más débiles que los hombres y por ello necesitan de un trato preferencial, gastar más en programas que no resuelven nada y que hemos visto el resultado que producen, la polarización social por el sexo.
Literalmente esta plataforma es al mejor postor, ya que dicen que no buscan ser opositores a nadie, sino que les extendían la mano a los partidos que apoyarán su plataforma y la cumplieran después de las elecciones de 2021, con esto, les facilitará la tarea a todos aquellos partidos que no tuvieran algún plan para las elecciones y presentar como ideas suyas lo que proponen.
Por ello no extrañó a nadie que el mismo día de su salida, el presidente del PAN, Marko Cortés, saliera a felicitar esta “iniciativa”, ya que prácticamente fue su partido uno de los más castigados no solo en 2018, sino en las elecciones de Hidalgo y Coahuila, donde ya son simbólicos como oposición, estando en busca urgente de algo que ayude a ganar los votos que han perdido.
Es ahora, durante una pandemia, que vemos cómo el progresismo quiere venderse como una alternativa a la política socialista del actual gobierno cuando ambas se complementan. ¿Hasta cuándo se verá una verdadera opción política con ideas propias? Tal parece que la “mafia del poder” no tiene ideas propias y necesita del progresismo para tratar de ganar visibilidad.
Fuentes:
https://www.sipormexico.org/propuestas